Esta semana he vuelto al
Círculo de Bellas Artes de Madrid, después de mucho tiempo, para enseñárselo a un amigo. Al subir la escalinata busqué la balaustrada que
restauramos hace unos años. He sentido una gran satisfacción por lo fuerte que
se encuentra el tramo que restauramos el equipo de Da Vinci Restauro. Trabajar
a esa altura con material tan pesado como el mármol es complicado.
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Estado preliminar |
Un fuerte golpe fracturó cinco balaustres, y el pasamanos
cayó hacia el interior provocando a su paso la ruptura de los peldaños en diferentes sitios.
La primera parte del
trabajo consistió en reconstruir todos los balaustres, adhiriendo los pedazos
con resina epoxídica. Se insertaron espigas de acero en los cinco soportes. La
complicación vino por la colocación del pasamanos, una pesadísima pieza que
había que ajustar en las espigas insertadas. Para ello colocamos dos andamios,
con una vara de acero uniéndolos por el hueco de la escalera, donde enganchamos
un polipasto que nos ayudó a ir moviendo la pieza hasta dar con su posición
correcta.
Finalmente se rellenaron los peldaños fracturados con resina sintética y polvo de mármol a modo de masilla. Se lijó hasta su nivelación y se patinó para igualar el tono del mármol original
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Colocación de espigas |
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Encolado con resina |
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Ajustando el balaustre |
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Ajustando el balaustre |
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Después de la restauración |
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Después de la restauración |